martes, diciembre 12, 2006

Dote

Después de largos años he venido,
a guardar en las manos bienvenida,
que llegan a brillar cuando las nubes,
se aprietan y se anudan boca arriba.
También guardé cuadernos y papeles,
acunados en sobres y en armarios,
que preservan la luz y la mentira,
que no saben de deudas y epitafio.
Intactas me quedaron cicatrices,
espasmos y roturas desangradas,
se muerden y suturan inasibles,
siempre dolientes y desarropadas.
He aprendido a cargar las consecuencias,
de miopías y grandes artefactos,
la reacción en cadena, los abrazos,
que atesoro o desando con mis pasos.
Al fin de cada día tengo el cielo,
que enrojecido y alto me reclama,
al fin de cada noche viene un plazo,
para prender la luz y oír el agua.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Me encantaria poderte hacer una observacion, una critica, ponerte el pie, pero es imposible, por que lo que escribes es mas, mucho mas de lo que yo se leer.

Felicidades y Afectos


Besote

11:25 dijo...

besos de duermevela, insomnios y años de nubes enrolladas